
¿No las han visto? Se las recomiendo. Pasan en Animax, Crayon-Shin Chan es un moconete descastado y divertido.
Y no, no están ñoñas ¿eh Ale?
Espero que un viento reparta hacia el sur y a ultramar un pequeño abrigo de consuelo, de guiños que templen sus suspiros en la distancia.
A veces las nubes son largas y no pasan rápido, se quedan ahí, ahondando la tristeza. Pero siempre habrá una pequeña acción que repercuta en nuestras vidas, para creer en ese poder misterioso del Ser del mundo y aguardar imposibles milagros.
Les dejo a continuación una historia espeluznante. Mínimo tómense la molestia en leerlo y por favor no consuman café en este lugar.
Fotos y texto tomado de: http://lamentiragratuita.blogspot.com
Alguna vez en al vida todo aquel que ha venido al Puerto de Veracruz ha tomado un café en el café de la Parroquia, nadie se resiste a hacer sonar la cuchara contra el vidrio grueso del vaso donde sirven el café lechero, viene un mesero con una enorme tetera y sirve la leche a chorro, entre mas grande y alejado de la tetera sea este mejor, y creo que luego viene otro mesero y te sirve el café… hace mucho que no voy. Esto es una tradición, tengo maestros que antes de hacer cualquier cosa en el día se reúnen ahí para tomar el café; ya después puede comenzar el día y esto ha sido así por muchos, muchos años.
Pues bien, el día de hoy y para variar, todo mi grupo fue de práctica al rancho de uno de los dueños de tan histórico lugar, la leche que aquí se produce es la misma que sale de aquellas teteras. No esta lejos de la cuidad, es mas la mancha urbana ya se lo comió y creo que a esta alturas seria mejor venderlo por metro que tratar de seguir produciendo. Sin embargo sigue siendo un gran terreno, se tienen aproximadamente unas 300 cabezas, el hato se divide en dos: en una parte donde la genética predominante es de raza holstein; (lechera) y la otra parte es una mezcla de hosltein (boss taurus) con cebú (boss indicus), 50 y 50% la cual se le llama “F1”, y aquí en el trópico su razón de existir es para producir carne y leche por igual. Le dicen de “doble propósito”; que realmente no sirven para nada, las dos producciones son ralas y escuálidas, pero aquí esta de moda.
Para empezar y como siempre en olor es bastante desagradable y si tienen una nariz de perro como la mía que todo lo huele, llega a convertirse en un calvario. Al llegar se realizaba la ordeña, que por cierto es manual, y al caminar entre los pasillos de la sala de ordeño todos nos dimos cuenta de un gran problema: todas absolutamente todas la vacas tienen un pésimo estado de salud, un fuerte pero muy fuerte problema de patas las aquejaba a todas, la inflamación de estas es verdaderamente de asombrarse y abrir la boca, casi ninguna conservaba el pelo de esta región, un color rosa encendido y grietas sangrientas era lo que había en su lugar. Una que otra vaca tenia fuertes problemas con las articulaciones de las rodillas, las bolas de edema eran inmensas, eran del tamaño de una toronja bien grande, si seguían creciendo pronto llegarían a tocar el suelo.
Después de realizar el trabajo asignado, varios recorrimos uno a uno los pasillos de la sala y se hizo notorio otros miles más de problemas: había una vaca que hace 6 días había parido y aún retenía pedazos de placenta, el olor que provenía de dentro de la vaca era de putrefacción. Pezones inservibles y deformados, tumoraciones a lo largo y ancho de sus cuerpos, cavidades oculares sin ojos y con supuraciones, colas rotas que no servían para hacer su trabajo: ser un arma y espantar a las moscas. Al final de la ordeña soltaron a los becerros para que se alimentaran con la raquítica leche que quedaba en la ubre, bien les iba si aun había algo que tomar, uno de los becerros en su desesperación por no obtener nada, rompió uno de los pezones de su madre y entonces si la leche empezó a correr profusamente, que de todas maneras el animalito no supo como tomarla y casi toda se desperdicio.
Algunos le avisaron al encargado de tal suceso y el don no hizo mas que decir: “aaa si, siempre pasa, no importa, ahí que se quede”.
En fin la condición de las vacas era para llorar, y si alguno no lo había considerado hasta ese momento, cuando soltaron a los animales para que se fueran al potrero a pastar, ese era el momento para empezar a hacerlo.
Todas las vacas cojeaban, su caminar era casi imposible, se notaba su dolor, en su cara en su caminar, en la posición de sus cuerpos al hacerlo: caminaban con el lomo arqueado y con suma lentitud. Las más enfermas solo daban dos o tres pasitos y se detenían por un buen rato hasta poder volver a intentarlo. Definitivamente había algunas que no iban a llegar en todo el día al potrero. La vista era simplemente deprimente, nos quejábamos con el maestro, nos preguntábamos una y otra vez por que nadie hacia nada con la salud de esos animales, indignados no podíamos creer que no existiera un MVZ no fuera el encargado del rancho o mínimo que hubiese alguno que fuera con regularidad al rancho, solo llamaban al veterinario cuando alguna vaca estaba tan enferma que se postraba y esto en una vaca sucede cuando verdaderamente ya no hay mucho que hacer, siempre dicen que cuando una vaca se hecha es casi imposible volver a verla en pie.
El maestro ponía cara de “a mi me vale madres” y nos decía con voz de santo redentor: “si muchachos que bueno que se dan cuenta de todas la carencias, todo eso quiero que me lo pongan en su reporte, en clase vamos a platicar todo esto”.
¡¡Me lleva la fregada con este tarado!! ¿De que va a servir que yo ponga todo lo que vi en un maldito reporte que ni siquiera va a leer y que va a ir a parar a la basura?
Se llenan la boca diciendo que el grupo no sabe nada, que no sabemos manejar el ganado… ok es cierto, pero el día que por primera vez la indignación y las ganas de hacer algo es general, nos manda al demonio y mejor llenen una hoja de papel.
Ya cuando nos íbamos, llego la camioneta del “gran café de la parroquia”, a recoger la leche, eso si en un camionetón. No es difícil imaginarse la gran ganancia económica que debe tener la gente que es dueña de este lugar, tampoco es difícil imaginarse que esta gente rebasa por muchísimo la economía de una familia de clase media, asi que me pregunto yo: ¿Por qué carajos, ya que tienen tanto dinero no hacen algo por sus animales?, ¿Por qué no hay un MVZ que se encargue de esto?, ¿cobraremos muy caro?, ¿no tendrán suficiente para pagarlo?
Hay una simplísima respuesta para todas mis preguntas: ¡¡NO LES IMPORTA!!, mientras den leche, mientras se puedan mantenerse en pie, mientras los sigan llenando de dinero y sobre todo mientras siga habiendo gente que todos los días se siente en las mesas a tomar un lechero, NO LES IMPORTA.
Así que la próxima vez que visiten el “Heroico puerto de Veracruz” y vayan a tomar café al “gran café de la parroquia”, acuérdense que en el fondo del vaso hay: severas cojeras, tumores, rodillas inflamadas al tamaño de una gran toronja, ojos secos y olor a putrefacción.
¡Que disfruten su café!
El lunes recibí la llamada de Alejandra, que si ya había sido invitada a la conferencia que iba a dar Guillermo Arriaga en la escuela. Como ni el correo había abierto no sabía y sí, lamentablemente tenía que ir a la escuela, no importaba que estuviera de vacaciones, pero una oportunidad así no se podía desechar.
Así que el martes por la noche, en una conferencia de dos horas y media, lo primero que nos dijo fue, que de entrada la palabra que él odiaba era guión y guionista. Cómo iba a ser posible que su trabajo de tres años se califique como una “guía”. Que hacer “guías” era peyorativo. Él las llama obras de cine. Tampoco aceptaba que la autoría sólo sea por parte del director, que la autoría se debe de compartir. Él quiere que su guión se lea como una novela, porque si uno logra esto con el lector, también lo puede hacer con el espectador.
Dio sus “tips” para escribir, y lo más sorprendente que dijo fue que él no sabe demasiado de sus personajes, deja que lo sorprendan sin conocerlos tanto. No investiga sobre lo que va escribir, la globalización ha enseñado que los problemas humanos son los mismos en cualquier parte del mundo. Lo que investiga es la vida, la literatura. Y que a menos que seas un genio, un diálogo de más de dos líneas es malo. Empieza a ser explicativo, confuso, es rollo. Si después de hacerlo de dos líneas lo podemos hacer más corto, y si eso que decimos lo podemos cambiar por un gesto es mejor. Debemos tener en cuenta que la vida real no equivale a la vida en cine. Hay que tener diálogos contundentes que en tres líneas revelen todo un mundo.
También nos contó de sus vicisitudes con Tom Lee Jones al filmar Los tres entierros de Melquíades, sobre su orgullosa capacidad de negociar en Hollywood y sobre su divorcio con el Negro González Iñarritú, que me pareció una pérdida por parte de ambos. De todos modos habrá que ver Babel, el último hijo de los dos.
Ponderó mucho el trabajo del escritor, que él no está al servicio de nadie, que no escribe las ideas de otros, que eso es lo que lo ha definido, por lo cual lo rechazan o lo llaman, se hace de amigos o enemigos.
"Sólo se pueden hacer en esta temporada, porque es tiempo de granada. Aquí los chiles son grandes, escalbados -introducidos en agua o aceite para quitarles todo el pellejo-, para que no piquen. Ahora bien, el secreto está en el sazón", concluyó Ramón Reyes.
¿Ya ven porque digo que no se puede confiar en comer un chile en nogada en cualquier parte? ¿Cómo se atreven a decir que son con recetas originales y le ponen leche condensada La lechera y crema lincott, esencia de vainilla ¡por favor! y qué decir sobre los duraznos en almíbar, ¡Guácala! Eso sin contar el hecho absurdo de querer quitarle al chile su picor. No, yo paso de comerlos en ese lugar.
Martha Chapa tiene un libro sobre chiles en nogada con treinta y cinco recetas diferentes, de distintos chefs. Se llama Con sabor a patria. No he podido verlas todas y poder recomendar la mejor, espero no encontrarme con aberraciones de este tipo. Lo que si es cierto es que es un platillo de temporada, no pidan comerlo en enero. Tiene que ser elaborado con la fruta que la generosa naturaleza nos ofrece en esta época. Unos buenos duraznos (de Zacatécas), manzanitas panocheras (o de Zacatlán) de esas que nadie quiere comprar porque las ven sucias, grasientas y ralladas (esas son la buenas y aciditas mmmh), peras de agua o pera piña, hay quién le pone membrillo, una vez le puse pero quedaron muy ácidos. Su crema, ya dije que sea ácida y con un poco de queso de cabra, (¿Por qué ese afán de hacerla dulce?) . Sin faltar por supuesto la insustituible granada, por cierto que ya sacaron una de cáscara muy rosita y la hay casi todo el año, claro que el sabor no es el mismo.