Veo esta nota en el periódico EL PAIS y no deja de asombrarme. Un alcalde de una pequeña provincia italiana da un premio de 50 euros (700 pesos) a quien baje 3 kilos en un mes y un estímulo de 100 euros a quien lo mantenga en los próximos cinco meses.
¿No se les hace poco? Imaginen cuánto gastan a la semana por lo que comen y luego pensar cuanto tiempo les ha costado alcanzar las dimensiones de cintura que tienen. Una buena panza cuesta, qué si lo sabré yo. Ponerse a dieta sale muy caro: carne sin grasa, cero carbohidratos, mucha fibra, verduras y frutas. Ah, y el tiempo que hay que pasarse en el gimnasio o en el parque corriendo, espantando perros que nunca faltan. Al menos en esa localidad italiana les van a dar actividades deportivas gratis.
Yo quisiera saber en qué fonda mexicana puede uno ponerse a dieta, en todas te atarragan de carbohidratos: sopa de pasta, arroz con huevo o con plátano, tu guisado puede ser: chile relleno o alguna torta de verdura que siempre las hacen capeadas, milanesas, tacos de pollo, frijoles, aguita de sabor o chesco. Ese es un menú diario de miles de mexicanos trabajadores, a menos que lo evites y te dediques en la noche a preparar tu lonche del día siguiente y lleves tu lechuguita, tus verduras al vapor, tu atún vomitivo en agua, y si te portas bien algo de pastita con sal. En la noche te espera tu huevito duro y una porción de pollo hervido; esa es la realidad de las dietas mexicanas. Una buena fonda que te den una comida sin tanta grasa es impensable, inviable, imposible, no genera ganancias. Yo al menos agradezco enormemente cuando me dan algo de verduritas crudas con el guisado ¡puff al menos la libre para ese día! En cuanto a las cadenas de restaurantes de nombres chiquitos y anodinos prefiero ni hablar, sus famosos menús con bajas calorías son insípidos como todo lo que venden y carísimos, si hasta da coraje.
¿Cuánto dinero necesitaría el gobierno para ponernos a dieta a todos los mexicanos que estamos con sobrepeso? Podría ser una buena campaña publicitaria para algún candidato con la ayuda de alguna trasnacional apoyando la causa de bajarnos la tripa. Ya me imagino entrando a la fonda de mi amiga Yasmín y que me reciba con una ensalada de crudités, un bistec asado y una pequeña ración de arroz integral. ¿Alguien se apunta?
Yo voy a seguir disfrutando los tres o cinco kilos que tengo de más y procuraré darles mantenimiento en los próximos días: me espera una bacanal.
¿No se les hace poco? Imaginen cuánto gastan a la semana por lo que comen y luego pensar cuanto tiempo les ha costado alcanzar las dimensiones de cintura que tienen. Una buena panza cuesta, qué si lo sabré yo. Ponerse a dieta sale muy caro: carne sin grasa, cero carbohidratos, mucha fibra, verduras y frutas. Ah, y el tiempo que hay que pasarse en el gimnasio o en el parque corriendo, espantando perros que nunca faltan. Al menos en esa localidad italiana les van a dar actividades deportivas gratis.
Yo quisiera saber en qué fonda mexicana puede uno ponerse a dieta, en todas te atarragan de carbohidratos: sopa de pasta, arroz con huevo o con plátano, tu guisado puede ser: chile relleno o alguna torta de verdura que siempre las hacen capeadas, milanesas, tacos de pollo, frijoles, aguita de sabor o chesco. Ese es un menú diario de miles de mexicanos trabajadores, a menos que lo evites y te dediques en la noche a preparar tu lonche del día siguiente y lleves tu lechuguita, tus verduras al vapor, tu atún vomitivo en agua, y si te portas bien algo de pastita con sal. En la noche te espera tu huevito duro y una porción de pollo hervido; esa es la realidad de las dietas mexicanas. Una buena fonda que te den una comida sin tanta grasa es impensable, inviable, imposible, no genera ganancias. Yo al menos agradezco enormemente cuando me dan algo de verduritas crudas con el guisado ¡puff al menos la libre para ese día! En cuanto a las cadenas de restaurantes de nombres chiquitos y anodinos prefiero ni hablar, sus famosos menús con bajas calorías son insípidos como todo lo que venden y carísimos, si hasta da coraje.
¿Cuánto dinero necesitaría el gobierno para ponernos a dieta a todos los mexicanos que estamos con sobrepeso? Podría ser una buena campaña publicitaria para algún candidato con la ayuda de alguna trasnacional apoyando la causa de bajarnos la tripa. Ya me imagino entrando a la fonda de mi amiga Yasmín y que me reciba con una ensalada de crudités, un bistec asado y una pequeña ración de arroz integral. ¿Alguien se apunta?
Yo voy a seguir disfrutando los tres o cinco kilos que tengo de más y procuraré darles mantenimiento en los próximos días: me espera una bacanal.
7 comentarios:
jjajajaja, tengo que leer esa noticia!
Yo tambièn tendrìa que ponerme a dieta pero no puedo!!!
Aqui es tìpica la pizza con los amigos, el "aperitivo" (ya postearè sobre eso), los desayunos con cuernitos o pan dulce rellenos de chocolate o crema, las cenas super heavies, millones de recetas de pasta diferentes....COMO NO ENGORDAR!
Lo peor es que a mi novio tambièn le encanta comer. Y luego es uno bien fresa que busca los mejores restaurantes con las mejores comidas tìpicas y que todo estè hecho "a regola d'arte" bueno, como Dios manda, entonces todos nuestros viajes tienen siempre una huella culinaria y pos como decir que no! ya me imagino; èl con un platotote de pasta y yo con una mini ensalada y mi pechuguita de pollo asada jajajajaja
saludos!
si las fondas no son fuente fidedigna para adelgazar..te faltó que de postre hay jericalla (aqui) y flan o pastel....comer en una fonda es la onda....
Jericaya, mhhh, yo quiero ir a una fonda en Guadalajara. De hecho siempre que voy por allá las busco.
Hola Carmen
Pues que te puedo decir, si mi alimentación es una dotación diaria de gorditas de maíz con chicharrón verde, rojo, de queso, de carne con chile, etc.
Mi cintura está pasando de ser peligrosa a ser incontrolable.
Un abrazo
Yo por eso en el DF nunca pude ponerme a dieta, y eso que allá donde quiera encuentras puestos de jugos sanos, frutas, verduras y yogures con granola...
Acá en Monterrey es más fácil porque todo es lite y lo que no, pues lo sudas con el calorón que hace... jaja, o eso dicen...
Pues con todo y sus kilitos de más es usted una de las mujeres más hermosas que he visto (en foto) a últimas fechas.
Mejor así. Las mujeres con pancita y sonrisa pícara son preferibles a las anoréxicas amargadas y huecas.
¡Saludos!
¿Oyeron, leyeron y se fijaron del color de los ojos del lobo?
¡Esos son comentarios!
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