"Porque es nuestro existir, porque es nuestro vivir, porque él camina, porque él se mueve, porque él se alegra, porque él ríe, porque él vive: el Alimento"



Códice Florentino, lib,VI, cap.XVII

jueves, junio 21, 2007

Te mataré Ramírez

Imaginen el escenario, ustedes con una pareja apetecible y comienzan a decirle al oído:
1. Tu sexo orgulloso que se inflama y enardece.
2. Enardecida, ruego te derrames en todo mi cuerpo.
3. Ardo en la bruma de tus pliegues más íntimos.
4. El goce de tu tesoro y mi lengua encendida.

Todo esto no es más que el nombre de los platillos que sirve un restaurante de comida afrodisiaca. Ya me imagino estar frente al mesero diciéndole: Por favor, Mezclas tu carne tibia y mi deseo furioso, o Poseída y carnal yo ya no era más, ah, y de postre: Tu mirada susurrante y tu cuerpo ingenuo. Suena bastante divertido, pero si el mesero es horrible a lo mejor se lo pido por número.

Lo que se busca muchas veces en restaurantes de comida afrodisiaca no es otra cosa que las parejas se entonen, disfruten de los subterfugios y perifollos de la ambientación como si estuvieran en un teatro. Un afrodisiaco puede simplemente ser una imaginación portentosa, sin ella el mundo sería muy triste. El restaurante se llama: Te mataré Ramírez, cuya anécdota se basa en una amenaza que lanzó un marido engañado a su adversario.

Así que la próxima vez que visiten Argentina compran un montón de libros de autores dificilísimos de conseguir aquí y se van a comer a este lugar que por desgracia se encuentra hasta allá, además funciona como galería de arte erótico, tiene una boutique y escuela de ciencias eróticas. Cuando vayan para evitar apresuramientos incómodos procuren preguntar antes dónde queda el hotel más cercano. Esta es la página oficial de Te mataré Ramírez vale la pena perder el tiempo.

1 comentario:

Chilangelina dijo...

Muero por ir a Buenos Aires, me has dado una razon adicional.

Oye, hoy es cumpleaños de mi blog, ve por tu pedazo de pastel