viernes, marzo 31, 2006

Lo que quedó de los ángeles

Volaban en un pequeño bostezo de seducción
los navegantes del sueño azul.
Cuando el hombre indiferente les declaró la guerra
y ellos tiernamente abrigaron su desdén
con suspiros exaltados de sorpresas,
sutil remedio contra un mundo
con sed de asombro.

Ahora ellos sensatos reviven
en la brisa del parpadeo
lo que quedó de los ángeles.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Agradezco su tiempo por leerme y más por dejarme un comentario.